Cuando la Princesa del Pop, Britney Spears lanzó el videoclip de Make Me tomó a todo el mundo de sorpresa, pues ninguna de las fotos de los bastidores y teasers que habían sido divulgados aparecían en el resultado final del vídeo. Se alegó que la primera versión, dirigida por David LaChapelle, era “sin sentido”. Pero de acuerdo a la estilista que trabaja con el director, quien mandó detener las grabaciones del vídeo original fue Jamie Spears, padre de Britney.
Por las imágenes difundidas originalmente, el primer clip era muy sensual y atrevido, cosa que inmediatamente llamó la atención de todo el mundo en las redes sociales, al parecer, Britney Spears simulaba escenas de sexo con G-Eazy y había todo un clima de perversión envolviendo a los bailarines. Jamie Spears encontró apelativo.
“Hay teorías de la conspiración sobre eso en internet. David LaChepelle fue contratado en Julio para hacer un clip de un millón de dólares, yo me encargué de los vestuarios de 30 bailarines de pole dance. Dejamos a todos con como cowboys sexys. Se terminó cancelando el vídeo, y nunca salió. El padre de Britney Spears fue quien dijo ‘no’. ¿Qué tan loco es eso? Mi vida es muy extraña”. Declaró la estilista en una entrevista a la revista Nylon.
Esta no es la primera vez que Britney decide cancelar o cortar un vídeo musical, pues, en el año 2007 decidió botar a la basura el vídeo oficial de “Gimme More” y reemplazarlo por otro, en el 2013 le cortó una gran cantidad de escenas el vídeo musical de “Work Bitch” y en el 2014 tomó la decisión de cambiar toda la trama de lo que parecía ser un poderoso vídeo para “Perfume”.
A pesar de toda esta controversia, la canción no fue una decepción en ventas, pues, alcanzó el puesto #17 en el Billboard Hot 100 (por dos semanas).
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Cultura Britney / Editado: Cultura Britney / Foto: Archivo CB / +
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